jueves, 24 de enero de 2013

¿Cuantas veces podemos decir adiós definitivamente?

Química, he oido que hay gente que la tiene. Una atracción que no se puede cuantificar o explicar. ¿Esa es la razón detrás de esta perdida de control?
La química tiene que ver con las reacciones entre las formas mas elementales de la materia. Separa los elementos e impedirás su reacción.

D: Esto no puede volver a ocurrir
H: Que parte? El tranquilizante para caballos?
D:La parte del sexo
H: Sí, estaba pensando lo mismo
D:Porque?
H: Porque los dos sabemos que no acabaría bien
......
H:Te las arreglaste para estar alejado de mi un día entero ¿Que pasó con nuestro plan?
D:Lo que pasó fue Sal Price...
......
H: Te has preguntado como sería si no tuvieses todas esas reglas?
D:Prince no tiene xq morir, puedo hacer que se aparte para siempre
H: Suelo manejar las cosas yo misma. No necesito a nadie que me proteja.
D:Se que no, pero lo tengo todo controlado. Consideralo un regalo de despedida.
H: De acuerdo. Bueno supongo que vamos a por un record.
D:Un record?
H:¿Cuantas veces podemos decir adiós definitivamente?
D: Adiós

Ella acepta mis dos lados. El Dexter completo. Entonces, por qué me estoy escapando de esto? Porque cuando algunos elementos se mezclan, arden y explotan.

H: Esto es una locura?
D:Esto?
H: Tu y yo desayunando
D:Yo siempre desayuno, es importante
H: Se que habiamos decidido no volver a vernos otra vez, asi que solo quiero que sepas que si lo de anoche fue algo de una sola noche para ti, a mi me parece bien.
D:Vale
H:Pero si quieres que no volvamos a vernos otra vez mañana noche, tambien me parece bien
D: Vale
H: Eres muy conformista
D: Si

To be continued...


miércoles, 23 de enero de 2013

Reflexiones de un dia lluvioso...

Una cosa que aprendes cuando te vas a haciendo mayor es a manejar el dolor. Cuando eres pequeño y estás enfermo o te duele algo, no piensas bueno esto va a acabarse, no, lo que piensas es que duele y ya está. Eso es lo que hay, duele, lloras, pataleas, maldices y buscas a tu madre para que te cure y te de mimos durante el trance y lo mejor, si te sientes realmente mal no vas al cole...es como unas minivacaciones doloridas. En resumen, lo sufres hasta que una mañana después de dos días infernales donde creías que nunca volverías a ser normal y que ese dolor no cesaría, simplemente cesa y sales a jugar de nuevo. Ya está, se acabó y ya no vamos a pensar nunca mas en eso... Ese trance puede durar, unos minutos, unas horas, días, o incluso meses...Y lo recordarás como aquella vez que me dolió...

Pero que pasa con el dolor cuando nos hacemos mayores? Pues que aprendemos a manejarlo y a vivir con él (que no se malinterprete, no es bueno). Cuando eres mayor y te duele algo, no puedes quedarte en casa para que te cuide mamá o la abuela, no puedes llorar y montar una pataleta (en realidad puedes pero no surte ningún efecto). Cuando te haces mayor y te duele algo, tienes que seguir adelante con tu vida y cargar con ese dolor, tienes que ir a trabajar, quedar con tus amigos que posiblemente estén tan o mas jodidos que tú, tienes que hacer la compra, la comida, bajar al perro, sacar la basura, etc...No puedes tomarte esas minivacaciones, sufrirlo, pasarlo y ya. No, tienes que intentar vivir tu vida, cargar con tu enfermedad y aún por encima hacer ver a los demás que estás bien, que rindes y que eres super feliz...¿Por que? porque sabes que algún día se te pasará. Cuando te haces mayor has pasado por tantas enfermedades y tanto dolor, que sabes que en algún momento se termina, así que solo dejas que la vida siga adelante y esperas que llegue el día en que te levantes y estés curado. Siempre ocurre así, un día el dolor desaparece y estás "bien". Quizás te queden secuelas, pero aprenderás a vivir con ellas.

El problema es cuando la enfermedad es crónica e interminable, cuando cada cierto tiempo vuelves a enfermar, cuando sabes que nunca te curarás del todo...Cuando todos los días tengas que ir a trabajar, quedar con tus amigos que posiblemente estén tan o mas jodidos que tú, hacer la compra, la comida, bajar al perro, sacar la basura, etc...y sepas que además de ti, está el dolor...

Supongo que me gustaría pasar las enfermedades como antes...que mi mundo se paralizase y cuando estuviese realmente curada salir y punto. Pero ya no puedo, ahora soy mayor y solo puede esperar que pase lo más rápido posible...






domingo, 20 de enero de 2013

Cuentos para princesas con sonrisas eternas...

Había una vez una princesa muy dulce que vivía en un palacio de colores. Todos los lugareños la querían y pedían su consejo, porque era muy sabia y justa. Pero tenia otros dones, sabia hablar con los animales y veía a través de las personas, podía ver su alma, conocía lo que la gente escondía en su interior. Y así tenia ventaja porque podía juzgarlos y actuar con ellos como se merecían.

Un día llego al pueblo un mago y por primera vez la princesa se sintió consternada, porque no podía leer su interior y eso le atraía y le hacia rechazarlo a partes iguales. Su curiosidad hizo que se acercase mas y mas a él. Poco a poco fue desmontando su coraza y empezó a penetrar en su interior. Pero obviamente aquello trajo consecuencias porque el mago no estaba acostumbrado a que alguien le viera tal y como era. Siempre había tratado de ocultar su verdadero yo y se sintió desvalido, así que un día decidió dejar de ver a la princesa. Decidió que no quería que siguiera ahondando en su interior, no se había labrado una reputación, una vida, para echarla a perder...Así que se alejo de la princesa aunque eso le hacia daño.

La princesa se puso muy triste, ella no comprendía porque él se alejaba de ella. Intento buscar consuelo en los animales del bosque, en sus tareas para con los lugareños...pero nada llenaba ese vacío. Llegado el momento, ella decidió que si no podía llenarlo con otras cosas simplemente lo ignoraría, aprendería a vivir con él. Así que encapsuló aquel vacóo, aquel dolor y lo guardo en el fondo de su alma. Ya no lloro mas, ya no le echo mas de menos, ya no se preocupo mas por el...

Pasaron años, muchos, quizás demasiados...pero un día el mago que había pasado todo este tiempo sufriendo por haber abandonado a la princesa, intentando llenar el vacío que había dejado, volvió.
Y la princesa pudo ver el dolor a través de su alma, y su propio dolor volvió a salir...Entonces la princesa se vio en una encrucijada...Tuvo que decidir si abrir su alma o cerrarla para siempre...

Que vas a hacer, princesa?


http://www.casadellibro.com/libro-la-princesa-que-creia-en-cuentos-de-hadas/9788477206231/599782

jueves, 17 de enero de 2013

Supongo que si hoy fuera el día de mi muerte...

Supongo que si hoy fuera el día de mi muerte y mi vida pasara delante de mis ojos en secuencias cortas pero intensas y yo pudiera explicaroslas brevemente este sería el resultado...

Primero recordaría una mañana calurosa levantandome de la cama de mis padres mientras me rio a carcajadas porque mi padre ha contado un chiste o me esta haciendo cosquillas.

La siguiente diapositiva sería aquel accidente de gas en el edificio de mi tío que tanto me impactó...podía verse la cocina desde la calle de lo grande que era el agujero. Mi hermana dice que es imposible que lo recuerde, pero lo recuerdo.

Tengo mil y un recuerdos de mi misma, rebuscando en el bolso de mi tia o en aquella peluquería que tenía en una habitación. Tenía tantas cosas, todo manchaba, olía, pringaba y podía romperse. Creo que chupe muchas broncas por manazas...

Recuerdo intentar asustar a mis hermanos mientras ellos cotilleaban de sus cosas y que siempre me asustaban ellos a mi. Nunca entendía como se daban cuenta, ahora lo sé...

Tardes de piscina en las que yo era princesa y ella tiburón, tardes en las que gané dos hermanas y una familia...

“Vamos a contar las hojas, 1, 2, 3...Quieres salir conmigo?...4, 5, 6” Creo que es la forma mas bonita en la que he empezado a salir con alguien...supongo que eso solo pasa a los 14 años...

Llueve, lloro, hace frío, no entiendo nada...todo el mundo me da el pésame...pero yo no entiendo nada...demasiado pronto para entender, demasiado tarde para que alguien te lo explique.

Risas, juergas, amigos, amores, playas, pueblos, canciones del verano, zapatos de tacón, vestidos cortos y peinados extraños...estudiar, viajar, trabajar, otras ciudades, el cine, Borja.

Estamos llegando al final y esto cada vez va mas rápido...Rupturas, bodas, niños, princesas prometidas, thelma  y louise, homenajes, guiños, Madrid, Muradás, Beariz...camaras de fotos de pequeñiche, elfas de sonrisas eternas, Paris, Texas, cantantes de temas tristes, emisoras de música de mierda...y mi madre...siempre mi madre...

Todo eso es mi vida, todo eso me ha hecho lo que soy, cada una de esas vivencias me ha dado una cualidad o un defecto, supongo que depende de como lo mires...Asi que supongo que soy risueña, miedosa, curiosa, ingenua, mandona pero leal, enamoradiza, romantica cuando no me miran, fuerte pero débil, sin miedo a la muerte, pero totalmente aterrada con la idea de morir antes de cumplir mis sueños...algunos dicen que estoy loca, creo que solo hago cosas que ellos no comprenden, cruel a veces, superficial y snob otras...capaz de sonreir aunque mi mundo se desmorone, “que felices que caras mas tristes” que diría Iván...habladora, cocinillas, bipolar, voluble, soñadora, Leo al fin y al cabo...

Supongo que si hoy fuera el día de mi muerte, esto es lo que algunos podrán recordar, otros recordarán otras cosas...Ahh por cierto soy Jessica...


sábado, 12 de enero de 2013

Onofre, el zorro

Silvino, el gato, llevaba largo rato pensando como contrarrestar el golpe, se sentía enfadado y humillado, vamos que se sentía un imbécil. Había descubierto aquel tratado de espeleología (por llamarlo de alguna forma) casi por casualidad, porque llevaba tiempo allí y no lo había leido. Ya sabes,  la curiosidad mató al gato. Empezó a leerlo como hacía siempre, animado y revuelto, le gustaba leer entre lineas e intentar saber que parte sería mas interesante para él. Pero pronto empezó a sentirse mal, lo que leía hacia que se le encogiese el estómago, no entendía porque el autor había escrito semejante manuscrito. Cual era la razón para escribir eso y porque ahora? Se sentía triste, como se podía tratar con tan poco cariño algo tan hermoso, tratarlo como si fuera una piedra cualquiera del camino. Creo que se merecía algo mas que la conclusión que le estaba dando, creo que el autor se había equivocado escribiendo aquello. Dió la vuelta al libro para ver quien era el escritor...cuando leyó el nombre no dió crédito:

-Onofre, el zorro!!!- gritó

Onofre y él habían sido grandes amigos, lo habian compartido todo, incluso su amor por la espeleología. Muy a su pesar y por circunstancias que ahora no vienen al caso, habian tenido que separarse y solo habia sabido de él por amigos y familiares. Pero de pronto, aquello habia llegado a sus manos y no podía hacer otra cosa que sentirse contrariado y triste...Como hablaba así de algo que habian compartido juntos?algo que les habian hecho felices?tuvo ganas de llamarle y decirle cuatro verdades. Intentó relajarse. Releyó el manuscrito una y otra vez por si se le habia escapado algo, pero no habia nada que hacer...aquellas lineas le ponian triste y le destrozaban el corazón...supongo que no todos tenemos los mismos recuerdos sobre algo que amamos o que a algunos le es mas fácil odiarlo y olvidarse. El mismo había escrito pequeños ensayos sobre aquel tema, pero siempre desde un punto de vista precioso aunque terrible, esperanzador pero imposible. Ahora no sabia que pensar, quizás todo habia sido una patraña y lo que habian vivido solo habia sido real en su mente.

Silvino, el gato, lloró en silencio en su madriguera e intentó dormir...puede que algún día tenga ocasión de sentarse con Onofre, el zorro y le pida una explicación.

jueves, 10 de enero de 2013

La esperanza es una puta sin escrúpulos

    Llegaba tarde como siempre, corría bajo la lluvia intentando alcanzar el autobus, pero por supuesto este arrancó antes de que ella llegara.

    Sabía que tendría que esperar un buen rato antes de que el próximo pasara, estaba empapada y tenía frío, no había conseguido dejar de sentir frío desde el verano. Se sentó bajo la marquesina y vio caer la lluvia.

    No sé cuanto tiempo llevaba allí sentada antes de que se diera cuenta, supongo que cuando te pones a pensar en tonterías la noción del tiempo se pierde. Levantó la cabeza y lo vio allí, bajo la lluvia,  tirado en un charco. Fue como un latigazo en el corazón, como si alguien no le dejase respirar. Solo fue un segundo pero a ella le pareció para siempre (supongo que el conejo de Alicia estaría orgulloso de que lo hubiera comprendido). Se levantó y fue hacia allí, creo que ni siquiera se dio cuenta de que lo estaba haciendo, alargó la mano y lo cogió. Sabía que no podría ser el suyo, pero joder era tan parecido...que por un momento creyó que podría serlo. Cuando se dio cuenta estaba llorando, hacia tanto tiempo que no pensaba en él, hacia tanto tiempo que creía que le había olvidado. Cogió aquel trozo de cordón entre sus dedos y su mente voló, repasó cada uno de los momento olvidados, cada uno de los olores que había eliminado de su mente, cada una de las conversaciones que habían mantenido. Había pasado mucho tiempo pero se dio cuenta de que en realidad siempre habían estado con ella, nunca los había dejado escapar del todo. De pronto, todo lo que había sentido aquel otoño se plantó delante de ella y la abofeteó. De alguna manera había mantenido a esa puta sin escrúpulos llamada esperanza amordazada en algún lugar oscuro y profundo de su corazón, pero siempre había tenido mucha fuerza y creo que aquel cordón era la prueba irrefutable de que se había liberado. Intentaría sobrevivir, pero renunciar nunca había sido su estilo y sabía que iba a costarle mucho atraparla de nuevo.